Plan de pensiones: ¿ qué es y para qué sirve? El plan de pensiones es un producto financiero cuyo fin es generar un ahorro a largo plazo, pensado para disponer de una cantidad de dinero en el momento de tu jubilación. No obstante, existen otras circunstancias en las que te puedes beneficiar de este plan de ahorro como, por ejemplo, incapacidad laboral, desempleo de larga duración o fallecimiento. Asimismo, la función que desempeña este plan es servir de apoyo a la pensión pública recibida por parte de la de Seguridad Social cuando una persona se jubila. Pero es importante tener en cuenta al contratar este producto de ahorro, que no actúa como un reemplazo del sistema público de pensiones ni admite la renuncia a los derechos y obligaciones que supone esta prestación económica. En cambio, las aportaciones suelen ser flexibles respecto al importe, tipo y período. Para recuperar el dinero invertido, hay que esperar hasta el momento de la jubilación. Sin embargo, existen algunos casos excepcionales en los que puedes anticipar el cobro de este importe, por ejemplo, tener una incapacidad laboral total, el fallecimiento del titular, estar en una situación de paro de larga duración o presentar alguna enfermedad grave.  Ejemplos de planes de pensiones Se pueden diferenciar varios tipos de planes de pensiones según estos tres criterios:

• En función del constituyente:
  • Asociados: están promovidos por asociaciones, gremios y sindicatos para sus afiliados y/o miembros.
  • Individuales: son promocionados por las entidades financieras y contratados directamente por aquellos clientes que quieran ahorrar en su futuro.
  • De empleo: son fomentados por las empresas para sus propios trabajadores.
• En función de las aportaciones:
  • De prestación definida: tras recuperar el dinero, el titular de la cuenta recibirá el capital aportado, así como una prestación definida fijada con antelación.
  • De aportación definida: este plan tiene una cuantía definida en el contrato y es el titular o el promotor quien debe asumir la aportación de forma periódica.
  • Planes mixtos: este modelo mezcla las características de los dos tipos que hemos visto anteriormente.
• En función de la política de inversión:
  • Renta fija a corto y largo plazo: estos planes de pensión invierten el capital en productos financieros de renta fija, ya sea de carácter público o privado. La duración puede ser a corto plazo, si no supera los dos años o, por el contrario, a largo plazo si se exceden los dos años.
  • Renta fija mixta: es un plan mixto que combina la renta fija y la renta variable. Si deseas invertir en esta última opción tienes que saber que solo podrás usar como máximo un 30% del total del capital.
  • Renta variable: este tipo de pensión invierte en productos de renta variable y ofrece la posibilidad de obtener una rentabilidad mayor que los planes de renta fija, pero también se exponen a un mayor riesgo.
  • Renta variable mixta: es una combinación de la inversión del capital entre la renta fija (entre un 30 y 75%) y la renta variable.
  • Garantizados: este plan de pensión garantiza al titular de la cuenta la recuperación del dinero invertido inicialmente. Lo único que deberá hacer es mantener su capital hasta la fecha de vencimiento del plan.

Fondo de pensiones: ¿qué es y para qué sirve? En este sentido, el fondo de pensiones hace referencia a patrimonios sin personalidad jurídica, pensados para dar cumplimiento a los planes de pensiones que se incorporan en él. Es decir, son productos financieros que se crean con el fin de ser vehículos para efectuar las inversiones integradas en los planes de pensiones. Si ya tienes claro cuáles son las diferencias, en esta infografía podrás descubrir por qué es recomendable contratar un plan de pensiones. En Caja Rural Central, queremos aportar toda la información que necesitas para que puedas elegir la estrategia de ahorro que mejor se adapta a tus expectativas. ¡Planifica tu jubilación con el apoyo de nuestros profesionales!